Mediocridad

Ella le había dicho que lo lograría, que confiaba en él, pero él no lo logró. Ya se había hecho a la idea de que Ella era solo una fantasía, de que había pasado página, como había podido comprobar apenas una semana antes; pero tener que enfrentarse a Sus ojos sabiendo que no había estado a la altura, que la había defraudado, era aún peor que el propio fracaso en sí.

Así que casi se alegró cuando Ella le anunció que se iba fuera en el fin de semana en que él se quedaba solo: anhelaba pasar un rato con Ella sin tener que guardar apariencias, pero le aterraba tener que enfrentarse de nuevo a Su mirada sin tener nada que ofrecerle, aparte de mediocridad y autocompasión.