Pues él Igual

No dudó ni un segundo en enviarle un audio de la canción que sonaba en el bar en que él se encontraba, ya que era una canción que ya habían compartido antes y que Ella había publicado unos días atrás.

Más tarde, ya en su balcón, tuvo un momento de remordimiento, pero al final lo terminó aceptando: ¿Acaso Ella no le había enviado una canción especial apenas una semana atrás? Pues él igual.