Le extrañó porque hacía mucho tiempo que no le ocurría, pero por culpa de una última canción «prohibida» justo antes de dormir, aquella noche volvió a tener el sueño recurrente de emcontrársela besando a otra persona en medio de un lugar lleno de gente. Se alteró tanto que se despertó súbitamente, con el corazón roto y enfadado a partes iguales.
Hasta su propio subconsciente le mostraba ya que aquella historia había llegado a su final.