Martirio, suplicio, tormento, aflicción, angustia, congoja, inquietud, pena, tribulación, desazón… Podía utilizar una montaña de sinónimos para describir la tortura de desear escribirle a todas horas, de enviarle la tonelada de «reels» que guardaba en una lista para Ella, de confesarle una y otra vez que lo único que hacía era pensar en Ella 24/7. Pero no podía, no podía hacer nada de aquello.
Tal y como él lo veía, solo tenía dos opciones posibles: o tratar de reconquistarla a toda costa, o desengancharse del todo y buscar un nuevo amor. Y, sinceramente, ambas opciones le parecían igual de imposibles.