Pese a que su cabeza, sus días y su vida en general parecían empezar a estar enfocados a otras cosas, Su recuerdo siempre se las arreglaba para aparecer en algún momento, como un fantasma penando que le recordase que seguía teniendo asuntos pendientes de otra vida que no habían sido zanjados.
La pregunta era si de verdad le merecía la pena zanjar aquel asunto, o consolarse por siempre con el recuerdo del amor más puro que sintió en su vida, pero que nunca llegó a ser.