Se imaginaba Su rostro acercándose muy despacio, los ojos entornados, y una media sonrisa que se iba borrando hasta que el contacto fundía sus labios y sus almas.
Ni siquiera él mismo sabía lo que llegaría a dar por un beso
Se imaginaba Su rostro acercándose muy despacio, los ojos entornados, y una media sonrisa que se iba borrando hasta que el contacto fundía sus labios y sus almas.
Ni siquiera él mismo sabía lo que llegaría a dar por un beso